Aunque no lo parezca, Santiago de Compostela no es solo un destino de peregrinaje. Cada año atrae a miles de turistas curiosos por descubrir la historia que la incesante lluvia intenta borrar de las piedras de sus calles y edificios. Hoy queremos ayudarte a planificar tu visita ofreciéndote la mejor experiencia posible en esta pequeña e importante ciudad.
Cuando hablamos de Santiago, es imposible no hacer referencia al tiempo, especialmente a la lluvia y al frío. A muchos les espanta el clima de Galicia, pero forma parte de su carácter, encanto y belleza. Por eso, sin importar la época del año en la que la visites, no te olvides el paraguas en casa. Con eso y un chubasquero no tendrás problema para incluso acabar disfrutando del mal tiempo.
Calles de piedra, galerías, agua e historia
La mejor forma para conocer Santiago es perderse por su casco antiguo. Se trata de un lugar único, con calles y edificios milenarios y pequeñas tiendas tradicionales que intentan sobrevivir a las grandes compañías. Los paraguas completan el paisaje de este pequeño pueblo de cuento en el que tendremos que pararnos a menudo bajo las galerías de los edificios o en el calor de algún café para resguardarnos de la lluvia. Ante nuestros ojos aparecerán plazas como la Cervantes, joyerías tradicionales especializadas en el arte del azabache, edificios centenarios de la universidad, cafés y restaurantes con una cálida atmósfera en su interior...
Da igual la dirección que tomemos, siempre acabaremos topándonos con la imponente catedral ante nosotros. Te recomendamos dedicarle un par de horas para recorrer su interior, conocer su historia y subir a sus tejados. ¿Reconoces los instrumentos de la orquestra del pórtico de la gloria? Seguramente no, ya que son instrumentos casi olvidados de la Edad Media como el salterio, la viola en ocho o el organistrum.
Los mejores sabores gallegos
Uno de los mayores reclamos turísticos de la ciudad son los mariscos, pulpos y pescado fresco que se exponen en las puertas y ventanas de los restaurantes de la Zona do Franco en el casco antiguo. Aunque su precio sea un tanto elevado, merece la pena probarlos, aunque solo sea por saborear las mejores recetas gallegas con carnes, pescados y verduras frescos y de alta calidad.
Nuestras recomendación es que pruebes, sin duda, el postre tradicional de la ciudad. La tarta de Santiago es una tarta a base de almendras y con la figura de la Cruz de Santiago dibujada con azúcar glas. Si no te queda espacio después de la comida, pide algo menos pesado, pero no te olvides de probarla en alguna de las pastelerías familiares del casco antiguo.
¿Sabías que la catedral te indica tu camino?
Efectivamente, todo peregrino que alcanza la meta del Camino de Santiago obtendrá como recompensa que la Catedral le indique el camino a seguir ¿Cómo? Pues para saberlo solo tenemos que tumbarnos frente a ella, en el suelo de la Plaza del Obradoiro y observarla atentamente ¿Reconoces la silueta de sus torres? Sí, conforman una M, y la tradición cuenta que representa la letra inicial de la palabra Mundo, hacia donde debe dirigirse todo aquel que visita la ciudad.
Como la catedral sabe que no todos sus visitantes son de habla hispana, también se atreve a aconsejar a los extranjeros. Estos, solo tendrán que tumbarse de espaldas a la catedral y podrán reconocer la letra W de la palabra inglesa World. Así que, sigamos explorando.
Visita el Patrimonio Histórico de la Universidad
A parte de los miles de peregrinos que encuentran en Santiago la meta de su camino, la ciudad atrae todos los años a miles de estudiantes universitarios y por ello respira siempre de un buen ambiente animado. Es gracias a su universidad que la ciudad nunca envejece, aunque ya son muchas las generaciones de estudiantes que han pasado por sus edificios.
Para conocer todos sus entresijos, sin duda la mejor opción es la de reservar la visita guiada que ofrece el Patrimonio Artístico de la Universidad de Santiago de Compostela. Se trata de un tour a cargo de una persona licenciada en Historia, que nos llevará por lugares más representativos tanto de la ciudad como de su universidad, mientras nos explica su evolución histórica.
Una tradición para todo visitante
En la parte posterior de la Catedral, encontraremos una de las plazas más bonitas y con más historia de la ciudad: la plaza de Platerías. No solo por sus espectaculares vistas a la Torre del Reloj (o de la Trinidad), sino que en el centro de la misma encontraremos una fuente del siglo XVIII llamada la “Fuente de los Caballos”. En ella, cuatro caballos sostienen el féretro de Santiago, mientras la figura de un ángel eleva una estrella hacia el cielo.
Lo curioso, es la costumbre que se ha desarrollado a partir de esta fuente, ya que, si visitas la plaza con algún local, seguramente te pida que te acerques hasta los caballos, para preguntarte si consigues ver sus patas traseras. En el momento en el que te detengas a buscar las inexistentes patas traseras, seguramente te salpiquen con el agua de la fuente, quedando oficialmente bautizado por la ciudad de Santiago.
Ciudad de la Cultura
Santiago es una ciudad milenaria que guarda misterios todavía por descubrir, pero se mantiene abierta a las nuevas tendencias. Prueba de ello es la construcción de la moderna Ciudad de la Cultura, un enorme complejo de edificios que en conjunto conforman una vista aérea completamente representativa de la ciudad: la concha que traen los peregrinos en sus bastones.
Diseñada por Peter Einsenman, aunque no sin polémica. Todavía está por terminar, pero ya podemos visitar alguna de sus instalaciones, como el museo de Historia de Galicia, la hemeroteca o la biblioteca general. En el futuro, se espera que sirva para acoger las tendencias en el mundo de las artes y de la ciencia.
Un amor eterno
En la plaza de la Quintana encontramos también otra de las historias más bonitas de la ciudad: la del eterno amor de un fraile por una monja. La cultura popular cuenta que un monje se enamoró de la figura de una de las monjas de clausura que vivía en el monasterio de San Paio de Antealtares que se sitúa en uno de los laterales de la plaza. Su amor pasó a la eternidad y por ello, si nos fijamos en la sombra que proyecta uno de los pivotes de esa plaza sobre la pared de la catedral cuando cae el sol, veremos la silueta y la sombra del monje, que aguarda allí paciente a que aparezca su amada.
Hogwarts en Santiago
Uno de los lugares preferidos tanto para turistas como locales de Santiago es la biblioteca de la facultad de Geografía e Historia. Este edificio del siglo XVIII solía ser la sede principal de la universidad hasta que en 1975 se convirtió en la facultad de Geografía e Historia.
En su interior podremos recorrer uno de los mejores claustros de la ciudad, pero sin dudas, lo mejor está en el interior pues guarda una espectacular biblioteca inaugurada en el año 1924 y que aún conserva su decoración original con sus mesas, suelo y estanterías de madera y lámparas antiguas. Es debido a esta decoración que tanto recuerda al famoso colegio de Harry Potter que los estudiantes de Santiago la denominan “Hogwarts”
La ruta del Sarela
Uno de los secretos mejor guardados de Santiago son las rutas de senderismo que rodean toda la ciudad. Por su singular belleza y proximidad al centro histórico, nosotros te recomendamos la ruta del Sarela. Se trata de un camino que sigue el río Sarela a su paso por antiguos molinos de agua y casas con muros de piedra.
Perfectamente señalizado, es la mejor forma para hacer la digestión después de una comida en cualquiera de los restaurantes del centro de la ciudad. También podemos decantarnos por otra ruta y subir hasta lo alto del monte del Pedroso, desde donde obtendremos la mejor panorámica de la ciudad.
Entre las ciudades más verdes
Otra opción igual de válida para bajar la comida es la de recorrer sus parques. Por su localización e increíbles vistas al casco antiguo y campus universitario, el más visitado es el de la Alameda, donde nos recibirán las dos Marías, una figura que representan a dos peculiares señoras santiaguesas que aportaban luz y color a los años más duros de la dictadura franquista en la ciudad. Pero no deberías olvidarte del parque de Galeras, el de Bonaval y el Parque de Carlogmano entre otros.
Foliadas
Debido a los centenares de estudiantes y turistas que visitan la ciudad, encontramos una intensa actividad cultural nocturna que ofrece un plan de diversión diferente cada noche. De todos ellos, no te deberías perder las foliadas.
Las foliadas son sesiones de música tradicional gallega con un fuerte carácter celta. En Santiago podremos disfrutar sin duda del arte de los mejores músicos que se reúnen en los bajos de las tabernas y pubs más emblemáticos de la ciudad para hacer disfrutar al público. Comienzan con un ritmo más lento y poco a poco se van juntando voces, gaitas, violines, flautas traveseras…que provocan los bailes, saltos y cantos de los que allí se reúnen, mientras corren los litros de cerveza y vino tinto “da casa”.
Uno de los pubs más conocidos es el de “A casa das Crechas”, en el corazón de la zona vieja y a cinco minutos andando de la Catedral. Por tan solo 1 euro podremos disfrutar de la mejor música en su nivel subterráneo con una calidad de sonido inigualable gracias a la robustez de la piedra de sus paredes.
Encontramos todo tipo de alojamientos en Galicia: casas rurales, casas privadas, dormitorios por la zona más bonita de Santiago de Compostela. ¿Conocías todas estas alternativas? Como puedes observar Santiago no es solo un destino al que llegar, sino un lugar en el que podremos disfrutar de toda una experiencia marcadamente celta.