Si visitas Figueres seguramente te sientas atraído por el legado de Dalí. Las calles de esta localidad rebosan vanguardia y tradición y acogen algunos de los mejores museos de Cataluña, como el Teatro-Museo de Dalí, pero… ¿quién se puede resistir a descubrir las playas de la Costa Brava?
Figueres se encuentra al norte de la provincia de Girona, a un paso de la frontera con Francia, por lo que es el lugar perfecto para descubrir las localidades y las playas más septentrionales de la Costa Brava:
Playas en Portbou
Si viajamos en familia, quizás la mejor opción sea acercarse hasta la localidad de Portbou para disfrutar de la Playa Gran de Portbou. Esta playa de arena gruesa y gris se encuentra en pleno centro urbano y cuenta con todo tipo de servicios: paseo marítimo, duchas, aparcamiento…
Si buscamos algo más natural y paradisíaco, podemos acercarnos hasta la Cala del Tres Platgetes, a la que podremos llegar siguiendo el Camino de Ronda desde Portbou. En verdad, esta cala consiste en una cala principal y dos secundarias, todas ellas protegidas del viento de la Tramontana y con un ambiente poco concurrido.
También destaca la Cala del Pi, una cala pequeña de guijarros oscuros y aguas cristalinas. La Cala del Pi es conocida por su ambiente íntimo y relajado, óptimo para la práctica del nudismo, y también por sus condiciones perfectas para la práctica del submarinismo y el snorkel.
Playas en Llança
Los 7 kilómetros de litoral de la localidad de Llança nos aseguran playas de todo tipo, desde las más concurridas con todos los servicios, hasta las más íntimas y naturales. Llança se encuentra a tan solo 20 kilómetros de Figueres, por lo que resulta una opción muy cómoda. Se trata de un pueblo típicamente mediterráneo, rodeado por las magníficas playas del Cabo de Creus y la Sierra de la Albera, repleta de rutas de senderismo.
La playa del Puerto y la playa de Grifeu son las dos playas principales y, gracias a la calidad de sus aguas, su limpieza y todos los servicios que ofrecen, ondean la bandera azul todos los veranos.
Por sus alrededores encontramos numerosas calas, como la playa de Canyelles o la playa del Cros, pero de todas ellas queremos destacarte la playa de Bramant. Se encuentra a menos de 1 kilómetro de distancia de Llançà y destaca por su espectacular escenario agreste. Está rodeada por una pared de piedra circular, de casi 10 metros de altura que dejan una pequeña apertura que permite su conexión al mar. Suele estar poco concurrida, por lo que seguramente disfrutemos de ella como si fuese nuestra propia playa privada.
Playas de Roses
Cambiamos de tercio y nos dirigimos a la zona sur del Cap de Creus, ya que otra opción igual de buena si quieres disfrutar de la playa cuando visites Figueres es acercándote hasta la localidad de Roses y descubrir su precioso litoral. Roses cuenta con numerosas playas urbanas que suelen estar bastante concurridas, ya que suelen ser la opción preferida por las familias al contar con todo tipo de servicios.
Si nos alejamos un poco del centro urbano encontraremos verdaderas maravillas, ya que el litoral sur del Cap de Creus está plagado de playas como la Cala Rostella, la Cala Montjoi o la Cala Jòncols. Todas ellas disfrutan de aguas cristalinas y piedras aplanadas, rodeadas por abundante vegetación. Eso sí, la mayor parte de estas playas no cuentan con ningún tipo de servicio.
Playas de Empuriabrava
Otra de las localidades de la Costa Brava cercana a Figueres es Empuriabrava. Esta localidad es una visita obligada debido a los canales que la conforman y que convierten la ciudad de Empuriabrava en la “Venecia de España”, en sus 7 kilómetros de costa seguro que encontramos la playa que estamos buscando. Una de las opciones más cómodas para las familias es la Playa de Empuriabrava, ya que se encuentra en pleno centro urbano y cuenta con todo tipo de servicios.
Pero también podemos decidirnos por alejarnos un poco, porque Empuriabrava se encuentra a un paso del Parque Natural de las Marismas del Ampurdián, repleto de verdaderos oasis naturales con aguas transparentes y arenas doradas, perfectas para relajarse y disfrutar del sol, el mar y la naturaleza en estado puro.
Las mejores son la playa de la Rubina y la playa de Can Comes, completamente vírgenes y con unas condiciones que las convierten en un paraíso para los amantes del kitesurf y del windsurf. Desde Figueres, podrás descubrir las mejores playas de Empuriabrava.
El Salto de la Caula en Boadella i les Escaules
Hasta ahora hemos repasado las mejores playas de la Costa Brava cercanas a Figueres, pero… ¿Qué te parecería pasar un día en una playa fluvial con catarata incluida? A tan solo 13 kilómetros de Figueres se encuentra el pueblo de Boadella i les Escaules que destaca por el “Salto de La Caula”, un salto de agua de 30 metros de altura.
El paraje parece un paraíso natural en el que nos podremos bañar y disfrutar de un día en la naturaleza. Por sus alrededores también aparecen numerosas cuevas, habitadas en tiempos prehistóricos y que merece la pena recorrer. Para reponer fuerzas, nada mejor que hacer un alto en el camino en el restaurante que se encuentra en el mismo Salto de la Caula, especializado en la gastronomía ampurdanesa.
Si nos apetece algo un tanto más movido, podemos optar por acercarnos hasta el embalse de Darnius Boadella y recorrerlo en kayak o en canoa. Una experiencia fantástica es la de seguir el río Muga hasta alcanzar las ruinas del pueblo de Sant Llorenç de la Muga, el cual quedó escondido para la eternidad bajo las aguas del embalse.
Hasta aquí nuestra guía por las mejores opciones para disfrutar del sol y de la playa si nos decidimos por una casa de vacaciones en Costa Brava. Como ves, en Figueres, aunque sea un pueblo de interior, no faltan las oportunidades para disfrutar de verdaderas joyas en la Costa Brava. Por eso, reserva tu casa de vacaciones en Figueres y prepárate para disfrutar de un verano de ensueño.