Es evidente que no vas a pasar hambre durante tus vacaciones en la Costa Brava. Menos aún si visitas alguno de los restaurantes con estrellas Michelin de la zona. En España, Cataluña le sigue al País Vasco, en cuanto a excelente reputación gastronómica. Te dejamos tres sugerencias que bien merecen la pena registrarse en su lista de espera para disfrutar de su comida.
El Celler de Can Roca - Mejor restaurante del mundo 2015
Visita El Celler de Can Roca y podrás presumir de haber estado en el mejor restaurantes del mundo. Galardonado con tres estrellas Michelin, el restaurante está dirigido por los hermanos Roca, Joan, Josep y Jordi. Ellos hacen uso de los ingredientes de la zona, experimentando una gastronomía molecular.
El comedor es el epítome de la elegancia contemporánea con sus acabados lisos. Para aquellos que prefieren una mesa fuera, es posible disfrutar de la comida de forma relajada en un jardín zen. Dondequiera que elijas sentarte, serás muy bien atendido por sus camareros.
El Celler de Can Roca ha sustituido al hoy cerrado El Bulli, como el número de uno de los restaurantes catalanes.
Esta es la lista de los mejores restaurantes del mundo, con el Celler de Can Roca en primer lugar como mejor restaurante del mundo 2015.
Bo.TiC
Entonces, ¿cuál es el punto fuerte de Bo. Tic? El chef Albert Sastregener juega con los ingredientes catalanes, o mejor dicho, ampurdaneses. Sus creaciones son dignas de ver para creer, como el Capuccino de langostinos que aparece en los aperitivos de su menú degustación.
La primera estrella Michelin le llegó en 2010. El comedor es minimalista con vigas de madera y la terraza de un intenso verde con la elegancia de comer fuera entre los árboles y arbustos del exterior.
Encontrarás Bo. Tic en Corçá, a mitad de camino entre la localidad costera de Palamós y Girona.
Casamar
Apropiadamente llamado Casamar, el restaurante del hotel bajo el mismo nombre, ofrece excelentes vistas al Mediterráneo. Sobre todo si cenas en su terraza con vistas a la Costa Brava.
Se encuentra en la exclusiva localidad de Llafranc, y a escasos 4 km de Calella de Palafrugell, un tranquilo pueblo de pescadores.
El chef del restaurante es Quim Caselllas, el hijo de los propietarios del hotel, y un aficionado de los productos frescos de temporada. Sus platos son traídos a la mesa a cargo de su hermana María. Podrás elegir entre la selección a la carta, o si quieres probar algo muy especial, no te pierdas su menú degustación.
